Debajo del capó de un coche híbrido hay tecnología. Tecnología que existe para darnos la posibilidad de movernos libremente con la máxima eficiencia, tanto de combustible como de emisiones (que en el fondo es lo mismo): máxima eficiencia energética con un mínimo consumo y las emisiones nocivas controladas al máximo.
Los coches híbridos de Toyota tienen la característica de que combinan de forma inteligente el poderío de los motores de combustión más afinados del mercado con los múltiples beneficios de la propulsión eléctrica que, en los momentos de arranque o de maniobra a velocidades "urbanas", permiten no solo ahorrar combustible sino circular sin emisiones contaminantes y con un nivel de ruido extremadamente bajo.
El motor de combustión, el más eficiente del mercado
Los motores de combustión (gasolina) de toda la gama Toyota están a las puertas de una renovación inminente, ya que en 2015 se habrán introducido 14 versiones de diferentes modelos con estos nuevos motores en todo el mundo. Esta es una muy buena noticia porque se trata de motores que mejoran la eficiencia de los actuales en alrededor de un 10% de media, algo nada despreciable teniendo en cuenta el nivel de consumos y emisiones al que nos estamos acostumbrando.
Bajo el capó del coche híbrido hay evolución. La tecnología híbrida es un paso adelante con respecto a la de combustión ya que se combinan en un solo vehículo dos propulsores de distinta naturaleza que colaboran entre sí. Cada motor entrará en funcionamiento en momentos determinados (calculados rápidamente por el "cerebro" del coche) para conseguir una óptima eficiencia energética, y minimizar la emisión de gases contaminantes.
La forma de trabajo del combinado híbrido se basa en complementar el funcionamiento: el motor térmicos empuja a velocidades medias y altas (en autovía por ejemplo) y el motor eléctrico funciona principalmente al arrancar la marcha o en ciudad a velocidades bajas, por ejemplo. Pero lo mejor es que ambos motores funcionan a la vez cuando es necesario, proporcionando un extra de potencia.
Las baterías no están exactamente bajo el capó del coche (su colocación depende del modelo), pero son una parte fundamental para el correcto funcionamiento del conjunto, pues suministran la energía al motor eléctrico. Sin ellas sería imposible disfrutar de las ventajas de la tecnología híbrida, y por eso son objeto constante de I+D. Las baterías proveen de energía, pero también almacenan la energía que se aprovecha con la frenada regenerativa, que se reutiliza posteriormente para la propulsión.
La eficiencia del conjunto híbrido se completa con la transmisión automática
No podemos dejar de mencionar las cajas de cambio automáticas que incorporan los coches híbridos de Toyota, que consiguen optimizar la eficiencia de combustible gracias a su funcionamiento. Como sabemos, se trata de cajas CVT que mantienen un régimen de revoluciones constante alrededor de la zona de mayor par.
Además la caja automática ayuda a mejorar el mantenimiento general del coche porque no tenemos toda la parte mecánica del embrague, y como los híbridos arrancan de forma natural con el motor eléctrico, "ser automático" es la mejor opción: una vez arrancamos y se conmuta al motor de combustión, ya llevamos suficiente velocidad como para no necesitar un cambio manual (además de que por lo dicho anteriormente, no tiene sentido).
Como vemos, todo en los coches híbridos está pensado para mejorar cada vez más la eficiencia de combustible y reducir las emisiones, y por eso es interesante conocer qué hay bajo el capó de estos coches, porque además cambia (evoluciona) muy a menudo.
